Tesoros en vasijas de barro rotas
Hugh Ross
Como dice en 2 Corintios somos vasijas rotas y hay una luz dentro de cada una de ellas. Esa luz […] es el Espíritu Santo. Nuestra tentación al ver nuestras deficiencias y debilidades es tratar de ocultarlas de los demás. Pero en 2 Corintios 4 dice: «No oculten sus debilidades, más bien permitan que el Espíritu Santo de Dios brille y atraviese las grietas para que todos puedan ver el brillo de la gloria de Dios por medio de ellas». […] Cada uno de ustedes tiene alguna debilidad o deficiencia al igual que yo y probablemente más de una. Yo tengo muchas. Permitan que Dios se valga de las mismas para que Su Espíritu Santo brille sobre los demás, los toque y los conduzca a la fe de Jesucristo.
Duración del video [en inglés]: 30 minutos.
Artículos recientes
- Decisiones, decisiones
- Cuando los sueños más preciados se hacen añicos
- Sigue a Dios, no a tu corazón
- Tentaciones en el desierto
- Fogosos testigos de Jesús
- Los efectos del cristianismo: El estatus de la mujer
- La gran fe de un centurión
- ¿De verdad la oración marca la diferencia?
- Dos formas en las que la esperanza del Cielo combate la ansiedad
- La Palabra de Dios: El cimiento de nuestra fe