marzo 29, 2019

Cinco maneras de crear un cambio en el trabajo

Producido por el Proyecto TOW

[Five Ways to Make a Difference at Work]

Si alguna vez te preguntas si trabajas en el lugar indicado para cambiar el mundo, la respuesta seguramente es un rotundo sí.

Hay muchas maneras de lograr un cambio en el mundo que no requieren renunciar al trabajo o cambiar de carrera. El relato de Daniel nos enseña a lograr una diferencia en el lugar de trabajo mediante actitudes y acciones sencillas. Las siguientes cinco acciones te ayudarán a destacar desde hoy mismo en tu entorno laboral.

1) Haz la diferencia mediante buenas relaciones laborales

El entorno laboral puede crear soledad y estrés. Las personas con las que trabajamos a veces se sienten poco valoradas y solitarias. Pero uno puede lograr un cambio en su vida al entablar relaciones positivas en el trabajo.

Cuando estudiaba el programa de formación administrativa en Babilonia, Daniel entabló una buena relación laboral con su supervisor, la cual fue de gran ayuda para ambos.

Daniel solicitó a su supervisor, el jefe de los eunucos, que le permitiera llevar una dieta vegetariana en vez de comer la carne sacrificada a los ídolos babilónicos. La idea no fue del agrado de su jefe. Podía perder su trabajo si uno de sus pupilos tenía una apariencia delgada o enfermiza. Daniel prestó atención a los problemas de su supervisor y sugirió métodos positivos para resolver el problema.

Puso Dios a Daniel en gracia y en buena voluntad con el jefe de los eunucos; y el jefe de los eunucos dijo a Daniel: «Temo a mi señor el rey, que asignó vuestra comida y vuestra bebida; pues luego que él vea vuestros rostros más pálidos que los de los muchachos que son semejantes a vosotros, haréis que el rey me condene a muerte.» Entonces dijo Daniel […] «Te ruego que hagas la prueba con tus siervos durante diez días […y] compara luego». Consintió, pues, con ellos en esto, y probó con ellos durante diez días. Daniel 1:9-14

Otras personas en la posición de Daniel habrían enrarecido el ambiente de trabajo con quejas o insubordinación. Pero Daniel entabló una buena relación laboral con su jefe al escuchar sus inquietudes y ofrecer una solución que los benefició a los dos.

Considera las presiones que sienten tus compañeros de trabajo. Procura ofrecer apoyo en cuestiones concretas. Cuando albergues dudas, ora de manera específica por tus colegas de trabajo.

2) Haz la diferencia aumentando tu disciplina en el trabajo

Muchas personas van a trabajar sintiendo inestabilidad emocional. Puede que tu jefe sienta mucha ansiedad por el desempeño de la empresa. Tus colegas podrían temer que nadie se preocupe de su bienestar. Pero puedes lograr un cambio en la vida de esas personas al mostrarles que Dios está a cargo y que pueden depositar en Él su confianza durante los momentos de crisis laboral.

La disciplina espiritual demuestra que confías en Dios y que Él es digno de confianza.

Daniel se atuvo a una dieta disciplinada y ello le recordó a él y a sus colegas el poder de Dios. Mientras los demás comían la suntuosa comida del rey, Daniel se mantuvo fiel a sus creencias. Aquella sencilla acción diaria demostró que Daniel confiaba en que Dios (y no los alimentos) le darían energía. Y funcionó muy bien para Daniel y sus amigos.

A estos cuatro muchachos, Dios les dio conocimiento e inteligencia en todas las letras y ciencias. Daniel 1:17

En la época de Daniel, los alimentos tenían una importante simbología espiritual, por lo que su disciplina al comer fue significativa para él y para los demás. Es muy probable que tus muestras de confianza en Dios en el trabajo sean distintas hoy en día. ¿Cómo demostrar tu fe en las acciones sencillas de cada día? Tal vez evitando el lenguaje soez o las críticas negativas y preguntando a otros si pueden orar por ellos cuando mencionan las dificultades de sus vidas. (La mayoría no se ofenderá si le pides permiso para orar por sus necesidades, aunque no sean creyentes, siempre y cuando lo hagas de manera respetuosa.)

Sea cual sea la acción que te recuerde la fidelidad de Dios, la práctica constante de esa disciplina demuestra a tus compañeros de trabajo que ellos también pueden confiar en Dios.

3) Haz la diferencia al prepararte para luchar por lo que es correcto

Llegado el momento, ¿crees que estarás listo para adoptar una postura firme en el trabajo? Lograr un cambio podría significar arriesgar tu carrera para defender tus valores. Si bien es posible que nunca llegue a ese punto, puedes empezar a prepararte hoy mismo al no aferrarte al dinero, el éxito y el poder. Esas son bendiciones de Dios, no sus sustitutos.

Aunque Daniel y sus amigos creyentes llegaron hasta la cima de la sociedad babilónica, estaban preparados para perderlo todo en defensa de los valores de Dios.

Entonces Daniel respondió y dijo al rey: «Tus dones sean para ti; da tus recompensas a otros». Daniel 5:17

«Nuestro Dios, a quien servimos, puede librarnos del horno de fuego ardiente; y de tus manos, rey, nos librará. Y si no, has de saber, oh rey, que no serviremos a tus dioses ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado». Daniel 3:17-18

¿Cómo se prepara uno para tomar una decisión así? Resulta más fácil cuando no se teme perder el trabajo. Si tienes un poco de dinero ahorrado, no estás endeudado hasta el cuello, vives dentro de tus posibilidades y no fijas tu identidad a un trabajo o una posición, no será el fin del mundo si te despiden por luchar por tus convicciones.

4) Haz la diferencia al crear una red de personas que piensan igual

Si intentas cambiar el mundo tú solo terminarás exhausto. Busca personas en tu empresa o industria que compartan tus inquietudes. Organiza una red de apoyo con personas que busquen lograr un cambio y reúnanse regularmente para brindarse ayuda y ánimo.

Daniel tenía su propia red de apoyo con amigos leales.

Daniel solicitó y obtuvo del rey que pusiera sobre los negocios de la provincia de Babilonia a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Daniel 2:49

Los cuatro amigos creían en Dios y ello los convirtió en colegas y compañeros ideales. Es probable que se reunieran a menudo para hablar de problemas en el trabajo y para orar unos por otros. Su deliberada cercanía les permitió brindarse apoyo en el trabajo de todos los días y también en los momentos más difíciles de sus vidas.

Procura encontrar personas que piensen de manera similar a ti en el trabajo o en tu zona, y comiencen a reunirse regularmente para orar y ofrecerse apoyo. Resulta más fácil encontrar personas creyentes en su industria al unirse a una asociación profesional basada en la fe cristiana.

5) Haz la diferencia al incluir a Dios en tu trabajo

Se puede lograr un cambio en el lugar de trabajo al incluir a Dios. La Biblia presenta muchas sugerencias sobre cómo integrar la fe con el trabajo, pero todo empieza en el mismo lugar: en nuestra relación con Dios. Los momentos frecuentes de oración y comunión con Dios nos preparan para llevar Su presencia a todos lados.

Daniel oró tres veces al día durante toda su carrera, y con mayor frecuencia durante momentos de dificultad en su trabajo.

Cuando Daniel supo que el edicto había sido firmado, entró en su casa; abiertas las ventanas de su habitación que daban a Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, oraba y daba gracias delante de su Dios como solía hacerlo antes. Daniel 6:10

Todas las maneras en que Daniel logró un cambio en su trabajo se basaron en su cercanía a Dios.

Tu relación con Dios es una tarea que puedes mejorar desde hoy mismo. Ora, alábalo y lleva contigo esa actitud a tu trabajo. Para cambiar el mundo no hace falta un cambio significativo en tu vida, ni cambiar de trabajo o abandonar la sociedad secular. Procura conectarte con Dios a través de estas sencillas acciones y lograrás una diferencia en el lugar donde te encuentras.

Tomado de https://www.theologyofwork.org/resources/how-to-make-a-difference-in-your-workplace. Si desean leer más, visiten el Comentario Bíblico del libro de Daniel en el Proyecto TOW (Teología del Trabajo; por sus siglas en inglés).

Publicado en: convicción, integridad, otros autores, relación con el señor, responsabilidad, testificación, trabajo en equipo, valores