Dios está obrando para que no te cueste esperar
Jade Mazarin
La mayoría de los padres estarían de acuerdo en afirmar que a sus hijos no les gusta esperar. Si hay algo que los niños no quieren escuchar es que su mamá les diga: «Ahora no». Puede provocarles ira, frustración e incluso desesperación. Esta «inquietud» que nos hace impacientes, nos sigue a la mayoría hasta la edad adulta. Puede que no respondamos con los mismos arrebatos emocionales que los niños, pero a la mayoría de nosotros todavía nos disgusta esperar lo que queremos.
(Leer el artículo [en inglés] aquí.)
Artículos recientes
- Una nueva dimensión de la oración
- El rico y Lázaro
- Palabras y actos de bondad y aprecio
- ¿Decepción? ¿O Su elección?
- Caridad a la luz de la eternidad: lo que diferencia el servicio cristiano de los demás
- Hacer el bien
- La Palabra permanente de Dios: La Biblia
- El valor de hacerse presente
- El llamamiento de Dios para tu vida
- La venida del Hijo del hombre