Dios está obrando para que no te cueste esperar
Jade Mazarin
La mayoría de los padres estarían de acuerdo en afirmar que a sus hijos no les gusta esperar. Si hay algo que los niños no quieren escuchar es que su mamá les diga: «Ahora no». Puede provocarles ira, frustración e incluso desesperación. Esta «inquietud» que nos hace impacientes, nos sigue a la mayoría hasta la edad adulta. Puede que no respondamos con los mismos arrebatos emocionales que los niños, pero a la mayoría de nosotros todavía nos disgusta esperar lo que queremos.
(Leer el artículo [en inglés] aquí.)
Artículos recientes
- Dios nos moldea por medio del fracaso
- Vienen mejores días (7ª parte)
- Dios cuida a las viudas
- Crecimiento en semejanza con Cristo
- El abundante suministro de Dios
- Cómo llorar con los que lloran
- La historia de Ester, segunda parte
- «Estoy haciendo algo nuevo»
- La historia de Ester, primera parte
- Él siempre está contigo