¿Cómo podemos sentir alegría cuando lo hemos perdido todo?
Vaneetha Rendall Risner
¿Cómo puede alguien sentir alegría después de haberlo perdido todo? Ese es el misterio en los últimos versículos de Habacuc. Parece imposible e impensable sentir alegría cuando se esfuma todo por lo que hemos trabajado.
Habacuc 3:17 comienza diciendo: «Aunque la higuera no florezca, ni haya frutos en las vides; aunque falle la cosecha del olivo, y los campos no produzcan alimentos; aunque en el aprisco no haya ovejas, ni ganado alguno en los establos...»
Este versículo trata sobre la pérdida total y el desamparo. Sin higos. Sin fruta. Sin aceitunas. Sin alimentos. Sin ovejas. Sin ganado. Sin sustento. Este pasaje habla sobre perderlo todo. No tener nada que comer. Nada que vender. Nada sobre lo que construir una vida.
¿Qué les dice Habacuc a los israelitas sobre esta devastadora situación?
(Leer el artículo [en inglés] aquí.)
Artículos recientes
- Superar obstáculos
- Para Dios eres importante
- Nuestro pan de cada día
- Proclamar las buenas nuevas del evangelio
- Parábolas de Jesús: El rico insensato
- Don de generosidad
- El relato que elimina las excusas
- El arte desaparecido de repartir folletos del Evangelio
- La presencia de Dios en momentos de soledad
- Preocuparse menos, confiar más