mayo 1, 2018
Todo ser humano es creado con un deseo innato de tener amistad con otros. Es muy importante tener un vínculo con alguien que nos aprecia y que se alegra de vernos o de tener noticias de nosotros. Si eso falta, es posible que nos sintamos solos, abandonados y hasta sin esperanza. La vida en solitario es muy dura.
Esa necesidad es la razón por la que el rey Salomón, un hombre sabio, escribió: «En todo tiempo ama el amigo y es como un hermano en tiempo de angustia»[1]. En Proverbios 18:24 dice que «amigo hay más unido que un hermano».
Las amistades humanas son de suma importancia y pueden ser una parte extraordinaria de nuestra vida. Pero, ¿a dónde podemos dirigirnos cuando las personas nos fallan?
Hay un Amigo que nunca te fallará y jamás revelará los secretos de tu corazón. Hay un Amigo que no dejará de apoyarnos mañana, a pesar de nuestras imperfecciones, que siempre está dispuesto a ayudarnos en época de necesidad.
Puedes leer acerca de este Amigo en Juan 15:13-14, RVR 1995: «Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois Mis amigos si hacéis lo que Yo os mando».
Jesucristo, el Mesías y Rey de reyes que pronto volverá, ¡es el Amigo perfecto! Graemme Marshall[2]
*
«Desde hace años tengo por norma tratar al Señor Jesucristo como un íntimo amigo. No es un credo ni una mera doctrina; lo tenemos a Él, a Él mismo» Dwight L. Moody
*
Dios ha dicho: «No te desampararé ni te dejaré». Hebreos 13:5
*
Es estupendo tener muy buenos amigos, a quienes se pueda confiar casi lo que sea, ¿no te parece? […] Sin embargo, el amigo más extraordinario que tenemos tú y yo es el propio Dios. En Juan 15:15, Jesús hace una declaración sorprendente cuando dice: «Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de Mi Padre os las he dado a conocer».
Ahora bien, esta es una de las mejores definiciones de la palabra amigo que he escuchado: «una persona que entra cuando el mundo sale». Y ese es un buen resumen del versículo de hoy.
Dios es el más fiel de los amigos. […], el que siempre está presente e independientemente de las circunstancias, JAMÁS te abandonará. Te apoyará y te amará de manera absoluta y sin condiciones.
Jesucristo es, en efecto, el mejor y más querido Amigo. Y como cualquier amigo, confío en que hablarás con Él a diario y lo amarás plenamente.
¡Jesucristo es el más fiel de todos los amigos! Jack Graham
A menudo descubro que las personas —por su condición humana— no cumplen mis expectativas. Se quedan cortas. Pero lo maravilloso es que en Jesús tenemos un amigo, y Él nunca nos desilusionará.
1. Me apoya cuando nadie más lo hace o cuando nadie más puede hacerlo. Cuando tengo miedo o vergüenza de contar a alguien mis problemas, Él ya los conoce. Así pues, es muy fácil hablar con Él de mis problemas; además, Él siempre sabe cuál es la solución.
2. Me ama de manera incondicional y eternamente. No importa lo que yo haga, Él me ama, porque es el único que puede amar perfectamente, pues es un Dios perfecto. Él siempre me amará.
3. Dios nunca me verá de manera distinta. No importa cuántas veces me equivoque, nunca hace hincapié en los pecados que cometo. Ve Su santidad en mi interior, porque Él murió para limpiarme. Él hace que yo sea una bella persona.
4. Siempre me perdonará. Él es fiel para perdonar si confieso, y Él siempre tratará de ayudarme a que no cometa de nuevo el mismo error, porque Su poder se perfecciona en mi debilidad[3].
5. Jamás se aparta de mi lado. Incluso cuando lo abandono, Él todavía está conmigo. […]
6. Él siempre quiere hablarme o estar conmigo. Murió en la cruz a fin de poder hacerlo, y Él sinceramente aprecia todo el tiempo que podemos estar juntos.
7. Dios se encarga de todos mis problemas y me ayuda a no cansarme de este mundo. Si le presento mis problemas, me conforta y me da descanso de modo que pueda continuar en libertad[4].
8. Me da consuelo infinito. Me da discretos recordatorios de que yo no llevo las riendas, de modo que nunca tengo que preocuparme de tener dominada la situación, porque Él siempre me sostiene y además tiene un plan[5].
9. Sé que puedo confiar en el Señor. Dios jamás me ha fallado. Si lo necesito, Él está presente. Nunca me ha mentido, y nunca lo hará; y todas Sus promesas son ciertas.
10. Siempre me escucha cuando necesito hablar. Puedo orar y Él escuchará sea cual sea el tema. Solo quiere estar conmigo y escucharme.
11. Él nunca cambia, y es perfecto. No importa cuánto tiempo pase, Él fue, y sigue siendo, el mismo Dios perfecto. Dani Stafford[6]
*
Llegué al mundo y me uní a Mis padres terrenales en condiciones difíciles: nací en un establo[7], al poco tiempo tuvimos que huir para salvar la vida[8], y luego ya me establecí un poco y llevé una vida más o menos común y corriente, al menos hasta ser mayor.
Soy el Hijo de Dios, pero comencé en circunstancias humildes; y en la vida terrenal experimenté muchas de las mismas cosas que tú, de manera que pudiera entenderte, habiendo vivido experiencias similares a las tuyas.
No me imagines como alguien inalcanzable, que flota en las nubes. Mírame como a un amigo, alguien a quien puedes llamar por nombre: «Jesús». Luego conversa conmigo como si estuvieras hablando con uno de tus amigos.
Quiero ser tu mejor amigo. Quiero disfrutar de los buenos momentos a tu lado. Y cuando hay dificultades, quiero escucharte y ayudarte a encontrar soluciones.
¡Te prometo que seré un amigo con el que siempre podrás contar! Jesús, hablando en profecía
Publicado en Áncora en mayo de 2018. Leído por Carlos Ortiz.
[1] Proverbios 17:17.
[2] https://lifehopeandtruth.com/relationships/friendship/your-best-friend.
[3] 1 Juan 1:9, 2 Corintios 12:9.
[4] Mateo 11:28.
[5] Filipenses 4:6-7.
[6] https://www.theodysseyonline.com/why-jesus-is-my-best-friend.
[7] Lucas 2:7.
[8] Mateo 2:13.
Copyright © 2024 The Family International