Bueno y justo

septiembre 29, 2015

Recopilación

El Señor es justo en todos Sus caminos y bondadoso en todas Sus obras.  Salmos 145:17

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Creo que cuando uno está agradecido por la vida, y la percibe como una oportunidad de amar, la vida cambia y se vive de acuerdo a la intención de nuestro Creador.

Conozco personas que nos dan ejemplo de esto, que tienen una variedad de enfermedades y discapacidades, y a quienes yo considero sanas. ¿Por qué están sanas? Porque han aprendido algo que un doctor amigo mío dijo una vez: «Uno goza de buena salud cuando adquiere la habilidad de vivir sin ella».

Sam Keen cuenta de un amigo suyo que padece la enfermedad de Lou Gehrig. Está gravemente enfermo y hasta le costaba respirar. Sam fue a verlo y le felicitó por su actitud. El amigo le preguntó: «¿Qué otra opción tengo?», a lo que Sam le respondió: «Podrías estar molesto y quejarte un poco». El amigo le dijo: «Nunca se me ha ocurrido». Sin embargo, si le preguntas a la mayoría de las personas si la vida es justa, te responden enérgicamente que NO. Cuantas más riquezas tienen, más alto gritan. Tenemos que entender que la vida es difícil, pero no es injusta. Todos sufrimos reveses. La cuestión es aprender a convivir con ellos y hasta saber cómo aprovecharlos.

La vida del mismo Job nos enseña que las aflicciones sanan y la adversidad nos presenta una nueva realidad.  Bernie S. Siegel^[1]

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Con frecuencia te preguntas por qué algunas personas que son amorosas, buenas y desinteresadas sufren, mientras que otros que van a lo suyo y no tienen reparo en destruir los sueños ajenos con tal de conseguir lo que quieren, o pisotear a los demás para trepar la escalera del éxito, parecen tenerlo todo a pedir de boca. Aunque no siempre ves las consecuencias, cada persona recogerá en la otra vida lo que sembró en esta^[2]. En la otra vida prevalecerá la justicia.

Se sancionará a quienes hayan sido desconsiderados y crueles y causado sufrimiento a los demás; tendrán que padecer las consecuencias de su maldad hasta que se den cuenta de su error y se arrepientan. En cambio, quienes se portan bien en este mundo obtendrán en el otro recompensas y alegrías que ni se imaginan, por muchas penalidades o privaciones que hayan sufrido en la Tierra.

Además de galardonarlos en el más allá, Yo bendigo a los que en esta vida se conducen con amor y desinterés. Los bendigo espiritualmente, dándoles felicidad y contentamiento, paz interior y una conciencia tranquila. Algunas de las personas más adineradas del mundo son también de las más tristes, solitarias y perdidas, toda vez que el dinero no satisface las necesidades del espíritu.

Procura, pues, las bendiciones de Mi Espíritu: el amor, el gozo y la satisfacción de haber hecho lo posible por llevar una vida acorde con Mis principios. Entonces te darás cuenta de que la vida en verdad no es ingrata.  Jesús, hablando en profecía.

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Tú eres el dueño de todo, y lo que te hemos dado, de ti lo hemos recibido.  1 Crónicas 19:14

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En un contexto cristiano, la vida eterna, el dolor, el sufrimiento y el mal se pueden enfrentar y tolerar con fortaleza, esperanza y confianza que no están presentes en el ateísmo. Lo que yo consideraba injusto antes, ahora es menos atroz. Lo que antes era insoportable se puede enfrentar con esperanza. El concepto de maldad, con mi nueva perspectiva cristiana, no es el mismo problema que cuando lo percibía desde mi perspectiva atea, porque la maldad no es realmente un problema para los cristianos.  J. Warner Wallace

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Yo sé que estás sufriendo un contratiempo complicado, y es posible que no te parezca justo. «¿Cómo es que siempre estoy teniendo tantas pruebas y batallas?» ¡Pero fíjate de cuántas bendiciones y privilegios disfrutas! Fíjate en tu familia, amigos y el lugar donde vives. Si a veces te parece que pasas por muchas batallas terribles, alabar al Señor por todas las bendiciones que te da te puede ayudar.

Mediante las pruebas y tribulaciones que encaras, Él te puede ayudar a lograr victorias tremendas. La Biblia dice muchas cosas buenas de las pruebas, aflicciones y dificultades. Son algunas de las cosas que nos ayudan y nos moldean. No olvides que todos los grandes santos sufrieron, eso fue lo que los hizo grandes.

De modo que cuando te sientas tentado a decir: «¿Por qué me pasa a mí esto? ¡Qué terrible!» En vez de eso di: «¡Gracias, Jesús! Gracias por valerte de estos momentos de prueba para convertirme en lo que Tú quieres que sea.»  María Fontaine

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Bendito sea Tu nombre
en la tierra de abundancia
donde fluyen Tus arroyos de plenitud,
bendito sea Tu nombre.

Bendito sea Tu nombre
cuando ando en lugar asolado,
aunque esté en medio del desierto,
bendito sea Tu nombre.

Matt Redman

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Dios es bueno y justo en las buenas y en las malas. Su bondad se refleja en lo que da y en lo que retiene, lo que permite y lo que niega. Un concepto múltiple. Con una actitud así, es inevitable vivir con más alegría, fe, paz y gratitud.  Avi Rue

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Soy bueno y puedo hacer que las cosas aparentemente malas obren para bien, como ya lo hecho y volveré a hacer en el futuro. Te ruego que hagas el esfuerzo de ver todo lo «malo» desde la perspectiva de Mi promesa en Romanos 8:28^[3], y me podrás alabar por lo bueno que redundará de cada situación, aunque no lo veas en este instante. Mientras, puedes gozarte por haber pasado estas pruebas, que traen consigo bendiciones de algún tipo para ti, y que las puedes disfrutar aun ahora por fe, que es «la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve»^[4].

A Mis hijos el enemigo nunca los vence. Convierto cada calamidad que se presenta en una victoria, y no puede menos que ser vencido, hoy y por los siglos.  Jesús hablando en profecía

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La misma palabra «Dios» transmite cariño, bondad, benignidad; y el concepto de Dios en Su infinidad, es cariño infinito, bondad infinita y benignidad infinita.  Henry Ward Beecher

Publicado en Áncora en septiembre de 2015.

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